La talodinia hace referencia al dolor en el talón a causa de una enfermedad inflamatoria.

En el talón tenemos un hueso que lo forma llamado calcáneo que es el primer hueso en tocar el suelo cada vez que caminamos. Cuando sentimos un dolor generalizado en el talón, se le denomina talodinia.

Las causas de la talodinia puede deberse por anormalidades anatómicas o fisiológicas (pie plano o pie cavo), el varo o valgo del retropié puede causar un mal apoyo del pie y aumentar la tensión sobre las estructuras posteriores y laterales del tobillo y el talón, y la pérdida de la grasa de la almohadilla del talón es una de las principales causas de la talodinia.

A menudo puede desarrollarse como consecuencia del uso de calzado inapropiado o por un golpe en la zona. También se da por malas posturas al correr o caminar, presencia de callos y diversas enfermedades (cáncer, artritis, obesidad, etc.).

La práctica de deportes como el fútbol, senderismo, baloncesto, voleibol, atletismo y otros donde el pie tiene un papel protagonista ayuda a que se desarrolle una talodinia.

Otras causas que pueden originar su aparición son enfermedades reumáticas como la artritis reumatoide o la artritis psoriásica y la gota. Estas a menudo causan dolor en el pie y el talón.

El síntoma principal que presenta esta afección es la presencia de dolor, especialmente en la mañana cuando nos levantamos de la cama. Durante el día suele disminuir la intensidad del dolor y en ocasiones puede incluso desaparecer, pero si permanecemos en reposo un largo periodo de tiempo, el dolor puede aparecer nuevamente.

Para poder diagnosticar la talodinia, el dolor debe estar localizado en una extensa área del talón, en la parte inferior o en el perímetro del talón y no encontrar ninguna otra causa que genere el dolor. Para su diagnóstico se puede utilizar:

  • Rayos X.
  • Ultrasonido.
  • Análisis de sangre.
  • La resonancia magnética.

Su tratamiento principalmente se basa en el reposo, ya que el problema de la talalgia es que el solo hecho de apoyar el talón y el movimiento del pie al caminar puede agravar la lesión.

Es conveniente y necesario que el tratamiento pase a manos de un fisioterapeuta, ya que nos ayudará a acelerar el proceso de recuperación.

En algunos casos, si el dolor y la inflamación del talón persisten, es necesario el tratamiento quirúrgico de la lesión.

Si ya se ha pasado por una talalgia anteriormente, será importante adoptar medidas preventivas para evitar que se reproduzca:

  • Perder peso.
  • Uso de calzado adecuado para la práctica deportiva.
  • Evitar de calzado plano.
  • Utilizar plantillas ortopédicas o almohadillas en los talones.
  • Evitar correr sobre el asfalto o superficies duras e irregulares.

Los medicamentos anti-inflamatorios pueden proporcionar un alivio temporal, pero no actúan en la causa de la enfermedad.

En cualquier caso, si padecemos algunos de los síntomas citados debemos acudir al médico para que nos realice el diagnóstico y de esta manera tratar la lesión lo antes posible.