La cefalea es lo que comúnmente conocemos como dolor de cabeza, y es una de las formas más comunes de dolor intermitente que se da en el ser humano.
La cefalea tensional es uno de los tipos de dolor de cabeza que se da con mayor frecuencia. Aparece en forma de dolor de moderada intensidad que se localiza en la región occipital de la cabeza o en la frente, llegando a alcanzar en ocasiones la región cervical. Se le denomina tensional porque suele estar presente una tensión física, postural o psicológica (estrés laboral, estrés emocional,…) que desencadena en el dolor de cabeza. El dolor suele estar presente todo el día, aunque generalmente no suele impedir el desarrollo de la actividad física habitual.
Las causas que originan la cefalea tensional son:
- Factores genéticos (hereditarios).
- Hiperactividad de los músculos de la zona trigémino-cervical.
- Los cambios hormonales. La mujer se ve más afectada por las cefaleas debido a los cambios hormonales que sufre durante la pubertad.
- Factores ambientales: el estrés.
- La edad. Las cefaleas suelen ser más frecuentes en adultos que en niños.
- Ciertos alimentos como el chocolate, cacao, vainilla, plátano, frutos secos, cítricos, picantes,…
- El alcohol.
- La falta o el exceso de sueño.
- Algunos fármacos (vasodilatadores, nitritos,…).
Los síntomas que presenta la cefalea tensional son dolor localizado en una parte de la cabeza o dolor que afecta a toda la cabeza de forma general. Los dolores más comunes son: dolor eléctrico (calambre), dolor opresivo, dolor pulsátil, dolor terebrante y dolor explosivo.
Visiblemente los síntomas que podemos observar son: párpados más cerrados, espasmos faciales, párpados caídos, lagrimeo y enrojecimiento de ojos, vértigo, náuseas y vómitos.
Pueden darse otro tipo de síntomas que requieren visita médica como: alteraciones en la visión (manchas negras, luces brillantes, visión doble,…), sensación de hormigueo en brazos y piernas, erupciones cutáneas, mareo e inestabilidad, rigidez en la nuca, fiebre,…
La fisioterapia ayuda a tratar esta afección ayudando a aliviar la musculatura de la nuca y la columna cervical a través de diversas técnicas como la terapia manual dirigida a la musculatura temporal, etc., dependiendo de las necesidades del paciente.
Teniendo en cuenta el componente emocional de este tipo de cefalea, es importante ser consciente de ello e intentar realizar técnicas de relajación que ayuden a controlar las tensiones acumuladas y reducir el dolor.
¿Qué podemos hacer para prevenir las cefaleas tensionales?
- Controlar el estrés. Causa principal de la aparición de cefaleas y migrañas.
- Evitar el uso, en la medida de lo posible, de analgésicos y anti-inflamatorios.
- Evitar alimentos que pueden provocar el dolor de cabeza como el café, el chocolate, el queso, etc.
- Evitar posturas que ayudan a padecer dolores de cabeza.
- Realizar ejercicios, estiramientos y auto-masajes.