Hoy se celebra el Día Mundial contra el Cáncer creado para fomentar medidas destinadas a reducir la carga mundial de esta enfermedad.
El Cáncer es un proceso de crecimiento y diseminación incontrolados de células anormales que pueden invadir otros tejidos circundantes a través del sistema sanguíneo y el sistema linfático, y puede provocar metástasis en puntos distantes del organismo.
Todos los cánceres empiezan en las células, nuestro cuerpo está formado de muchos tipos de células que crecen y se dividen en una forma controlada para producir más células según sean necesarias para mantener sano el cuerpo. Cuando las células envejecen o se dañan, mueren y son reemplazadas por células nuevas. Algunas veces sucede que este proceso de reemplazo de células viejas por células nuevas se descontrola. El material genético (ADN) de una célula puede dañarse o alterarse, lo cual produce mutaciones (cambios) que afectan el crecimiento y la división normales de las células. Cuando esto sucede, las células no mueren cuando deberían morir y células nuevas se forman cuando el cuerpo no las necesita. Las células que sobran forman una masa de tejido que es lo que se llama tumor.
No todos los tumores son cancerosos; puede haber tumores benignos y tumores malignos.
Los tumores benignos no son cancerosos. Pueden extirparse y, en la mayoría de los casos, no vuelven a aparecer. Las células de los tumores benignos no se diseminan a otras partes del cuerpo.
Los tumores malignos son cancerosos. Las células de estos tumores pueden invadir tejidos cercanos y diseminarse a otras partes del cuerpo.
Existen diferentes tipos de Cáncer que se agrupan en categorías. Las principales son:
- Carcinoma. Es un tipo de cáncer que comienza en la piel o en tejidos que revisten o cubren los órganos
internos.
- Sarcoma. Comienza en hueso, en cartílago, grasa, músculo, vasos sanguíneos u otro tejido conjuntivo o de sostén.
- Se origina en el tejido en el que se forma la sangre, como la médula ósea, y causa que se produzcan grandes cantidades de células sanguíneas anormales y que entren en la sangre.
- Linfoma y mieloma. Dan lugar a cánceres que empiezan en las células del sistema inmunitario.
- Cánceres del sistema nervioso central. Dan como resultado cánceres que empiezan en los tejidos del cerebro y de la médula espinal.
Muchos tipos de cáncer se podrían prevenir evitando la exposición a factores de riesgo y un porcentaje importante de pueden curarse mediante cirugía, radioterapia o quimioterapia, especialmente si se detectan en una fase temprana.
(Fuentes: www.cancer.gov/espanol/cancer, www.aecc.es).
Desde Senso queremos recordar que la prevención y la detección temprana son fundamentales para detener el aumento de esta enfermedad.
Existen diferentes medidas preventivas relacionadas con los hábitos de vida, alimentación y otros factores, que son capaces de disminuir la probabilidad de aparición de cáncer. Las principales son dejar de fumar, tener una dieta saludable y equilibrada, evitar el consumo excesivo de alcohol, evitar la exposición prolongada al Sol y realizar ejercicio físico moderado o intenso de forma regular.